Inicio / Glosario

Glosario

Ácido acético
Es el ácido presente en el vinagre. Tiene una gran capacidad para impedir la proliferación de levaduras y mohos, por lo que lo ideal es que esté presente a niveles razonables en los ensilados para prevenir el calentamiento y la descomposición. Normalmente se produce en los ensilados por las bacterias ácido lácticas. El ácido acético puede producirse de manera eficiente por bacterias homofermentativas a partir de azúcares de cinco carbonos (p. ej. la xilosa) y por la conversión anaeróbica de ácido láctico a ácido acético por bacterias Lactobacillus buchneri. En estas situaciones, la fermentación será eficiente y no se producirán los compuestos potencialmente reductores de la ingesta. El ácido acético también puede ser indicador de una fermentación ineficaz y lenta impulsada por las bacterias ácido lácticas heterofermentativas. Este tipo de fermentación puede resultar en otros productos del ensilado que pueden reducir la ingesta, lo que significa que se ha desperdiciado energía (véase “Homofermentadoras y heterofermentadoras”).
Ácido butírico
La fuente principal de ácido butírico en el ensilado es la fermentación por clostridios, los cuales están presentes en el cultivo en niveles relativamente bajos al momento de la cosecha. Los niveles en el forraje ensilado pueden aumentar considerablemente al incluir suelo, lo que puede suceder cuando se siega el cultivo a un nivel muy bajo o durante el rastrillado o la henificación, en las ruedas del tractor de compactación en condiciones húmedas, o al sobrecompactar forraje con poca materia seca. El suelo puede contener hasta 10 mil millones de UFC de clostridios por gramo. Además de producir ácido butírico, que le puede dar al ensilado un olor fuerte y persistente a materia fecal, los clostridios también pueden descomponer las proteínas, lo cual conduce a una pérdida significativa de proteína y a la producción de aminas biógenas como la histamina, la putrescina y la cadaverina, que pueden afectar la salud y la producción del rebaño y producir olores asociados con la putrefacción o la descomposición.
Ácido isobutírico
Un isómero del ácido butírico, generalmente presente debido a la desaminación del aminoácido valina por los clostridios (aunque también se sabe que es producido por Lactobacillus brevis).
Ácido láctico
Es el más ácido de los ácidos de fermentación comunes, por lo que es el principal promotor de la caída inicial del pH, responsable del “encurtido” de la cosecha y del ensilado inicial de esta. Se produce por las bacterias ácido lácticas, cuyos niveles pueden variar dramáticamente en la eficacia de la producción y en los cultivos forrajeros ensilados. Por esta razón es importante inocular el cultivo forrajero con un alto número de productores eficaces de ácido láctico homoláctico si se requiere una caída rápida del pH. Sin embargo, el ácido láctico no tiene ningún efecto contra las levaduras y los mohos más allá de reducir el pH, y muchas levaduras comunes del ensilado pueden de hecho utilizar el ácido láctico para proliferarse.
Ácido propiónico
Un conocido inhibidor de moho usado para tratar muchos alimentos para prevenir el moho. También puede producirse en el ensilado tras la fermentación de azúcares o de ácido láctico por medio de bacterias productoras de ácido propiónico, como Propionibacterium acidipropionici, o como uno de los productos de la conversión de ácido láctico a ácido acético por Lactobacillus buchneri.
Ácido propiónico amortiguado
Se produce al mezclar ácido propiónico con una base, como el hidróxido de amonio, para producir una sal, como el propionato de amonio. En una solución concentrada este no será corrosivo, pero a medida que la mezcla adquiere más humedad, ya sea por dilución o en el cultivo cosechado, la sal se descompone formando iones de amonio y de propionato y se vuelve tan ácido como el ácido propiónico. El ácido propiónico amortiguado puede ser eficaz para prevenir la descomposición aeróbica, siempre y cuando se utilice a los niveles recomendados (4 a 6 lb/tonelada, o 1,8 o 2,7 kg/tonelada de peso fresco) pero no es eficaz como un acidulante general para ensilar forraje (las cantidades serían demasiado altas, cuyo costo sería prohibitivo). Los niveles bajos de ácido propiónico pueden estimular la producción de algunas micotoxinas.
Ácidos grasos volátiles (AGV)
Son ácidos producidos por microbios en el ensilado a partir de azúcares y otras fuentes de carbohidratos. Por definición son volátiles, lo que significa que se volatilizarán (evaporarán) en el aire, dependiendo de la temperatura. El ácido láctico NO es un ácido graso volátil, a diferencia de los ácidos acético, propiónico y butírico.
Acidosis ruminal subaguda (SARA)
Se da cuando el pH del rumen cae por debajo de 5,8 y permanece por debajo de este umbral durante tres o más horas en un período de 24 horas.
Aeróbicos obligatorios
Son los microbios que requieren de oxígeno para proliferarse.
Altramuces
Los altramuces son un tipo de legumbre anual de uso múltiple que se cultiva en todo el mundo para su uso en piensos, alimentos y forraje. Las principales especies de altramuces cultivados son los altramuces blancos, los altramuces amarillos, los altramuces azules y los altramuces perlados. Las semillas de altramuz blanco pueden ser una alternativa a la soya en todas las especies de ganado debido a su alto contenido de proteína de buena calidad.
Amoníaco anhidro
La adición de amoníaco anhidro al forraje eleva su pH, por lo que tiende a inhibir la actividad microbiana. El efecto sobre las levaduras y mohos es de inhibición permanente, siempre y cuando el producto se aplique en cantidades suficientes. Con el tiempo, las bacterias ácido lácticas y las enterobacterias se recuperarán y el ensilado se fermentará, aunque dicha fermentación se retardará considerablemente, lo que puede conducir a un aumento de las pérdidas de materia seca. El amoníaco es un gas peligroso y debe manejarse con cuidado.
Análisis de la fermentación
Para tener una idea de la calidad del ensilado y del patrón de fermentación, tomamos muestras y las enviamos a laboratorios aprobados (p. ej. CVAS, Dairyland, DairyOne, Rock River Labs, BLGG) para su análisis. Hay una serie de características que podemos solicitar en el análisis, todas las cuales se suman al costo, por lo que es importante entender lo que buscamos con él para no pagar por algo que no necesitamos. Si tenemos un buen ensilado que se conserva bien y estamos haciendo el análisis solo para mostrarle al productor la calidad alimentaria del ensilado, entonces limite el análisis al análisis de alimentación. Este mostrará aspectos como la materia seca del ensilado, el pH, los niveles de fibra y lignina, el almidón, los niveles de proteína (incluyendo la proteína bruta total, la proteína soluble y la proteína insoluble) y parámetros derivados, como la energía neta. Si el productor no está satisfecho con la calidad del ensilado, además de lo anterior, puede agregar un análisis de ceniza (muestra si había suelo o incluso lechada en el forraje: reste 7 de la ceniza y el resto será de fuentes ajenas a la planta; por ejemplo, si hay un 12% de ceniza, 12-7 = 5%, que es 100 lb/tonelada de MS de ceniza proveniente de suelo o lechada, posibles fuentes de clostridios [suelo] y enterobacterias [lechada]). Solicite también el análisis de fermentación (incluya propano-1,2-diol si se trata de un ensilado tratado con Lactobacillus buchneri) y también considere el análisis microbiano (normalmente solo si sospecha que las levaduras son la causa).
Andana
Forraje recogido en pilas sueltas a lo largo del campo en hileras, que pueden ser desde algunas pulgadas hasta varios pies de ancho, de manera que permita que el viento pase a través del forraje y ayude a que se seque.
Bacterias ácido lácticas (BAL)
Durante el proceso de ensilado, las bacterias ácido lácticas (BAL) juegan el papel más importante en la fermentación. Las BAL convierten los carbohidratos solubles en agua (CSA) en suficientes ácidos orgánicos, principalmente ácido láctico, en condiciones anaeróbicas. Como resultado, el pH disminuye y los microorganismos indeseables se inhiben.
Brix
Los grados Brix (con símbolo °Bx) miden el contenido de azúcar de una solución acuosa. Un grado Brix equivale a un gramo de sacarosa en 100 gramos de solución y representa la fuerza de la solución como porcentaje por masa.